Intimidación, ciberbullying y gestión de emociones en escolares sicilianos de educación primaria

  1. Liccardi, Giuseppa
Dirigida por:
  1. Inmaculada Méndez Mateo Directora
  2. Cecilia Ruiz Esteban Directora

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 15 de septiembre de 2021

Tribunal:
  1. José Manuel García Fernández Presidente/a
  2. Juan Pedro Martínez Ramón Secretario
  3. María del Carmen Pérez Fuentes Vocal
Departamento:
  1. Psicología Evolutiva y de la Educación

Tipo: Tesis

Resumen

Se trata de un estudio que tenía por objetivo analizar las relaciones entre los estudiantes de la clase, el clima escolar, las emociones entre los escolares, los aspectos comportamentales de las situaciones de acoso en función del rol (víctima, agresor y observador), características de la intimidación y el estado emocional. En segundo lugar, se analizan los diferentes perfiles envueltos en la intimidación y el ciberbullying atendiendo a características sociodemográficas, clima escolar, emociones y sobre todo a los mecanismos de desconexión moral. Los participantes del estudio fueron 239 escolares sicilianos con edades comprendidas entre los 8 y los 11 años escolarizados en Educación Primaria. El 51.5% fueron chicos y el 48.5% chicas. Se utilizó en primer lugar el Inventario de Bullying diseñado por Olweus (1996) en la traducción italiana de Genta, Menesini, Fonzi, Costabile y Smith (1996) para medir las formas de manifestación del acoso escolar (agresiones físicas, agresiones verbales, exclusión, ciberbullying ¿) en función del rol de víctima y de agresor así como el comportamiento y actitud de los observadores ante una intimidación. En según lugar, moral se utilizó el cuestionario elaborado por Bandura y colaboradores (Caprara, Barbaranelli, Vicino y Bandura 1996; Bandura, Barbaranelli, Caprara y Pastorelli, 1996) para la recogida de datos sobre los mecanismos de desconexión moral. El estudio contó con el informe favorable del Comité de Ética de Investigación de la Universidad de Murcia lo que permitió obtener el consentimiento informado de los padres y el asentimiento informado de los menores. El estudio ha permitido evidenciar que un clima escolar caracterizado por la existencia de burlas continuas interfiere en el estado emocional de los escolares, haciendo que aparezcan sentimientos de tristeza, aburrimiento, enfado e incluso distracción ante las tareas escolares. Las situaciones de intimidación se daban sobre todo por exclusiones en el grupo, por la apariencia física o por su comportamiento, por amenazas, rumores, insultos, agresiones físicas o por ciberbullying. La proporción de observadores que apoyaban al agresor era menor en comparación con los observadores en defensa de los víctimas. De forma general, las intimidaciones se daban sobre todo en el patio, seguidas de las horas de cambio de clase, en los baños o en los vestuarios, durante las horas de clase, así como en las entradas y salidas del centro. Finalmente, entre los roles de los directamente implicados, cabe destacar que el hecho de percibir un clima de clase sereno, con burlas continuas, sentimientos de tristeza en clase y la justificación moral predijeron el rol de victima en los escolares del estudio. Sin embargo, la edad, la percepción de un clima sereno y con burlas continuas predijo el rol de agresor. Del mismo modo, la edad, un clima de clase sereno, conflictivo, sentimientos de tristeza y los mecanismos de desconexión moral de difusión de la responsabilidad y de deshumanización predijeron el rol de observador. Los datos obtenidos en el estudio avanzan en el conocimiento de los mecanismos de desconexión moral, la intimidación y el ciberbullying. Por lo tanto, es necesario desarrollar la empatía como un vínculo necesario con el comportamiento prosocial y moral, y promover programas educativos que fomenten un clima escolar que favorezca la convivencia. PALABRAS CLAVE: Acoso, Escolar, Concepto moral, Educación, Afectividad, Víctima