Oportunidades y retos en una experiencia de clase inversa en ingeniería
- Ignacio Despujol 1
- Linda Castañeda 2
-
1
Universidad Politécnica de Valencia
info
-
2
Universidad de Murcia
info
- Rosabel Roig-Vila (coord.)
Editorial: Instituto de Ciencias de la Educación ; Universidad de Alicante / Universitat d'Alacant
ISBN: 978-84-617-8972-6
Año de publicación: 2017
Páginas: 137-138
Congreso: Jornadas de Redes de Investigación en Docencia Universitaria (15. 2017. Alicante)
Tipo: Aportación congreso
Resumen
El objeto de esta comunicación es describir la experiencia obtenida al impartir con metodología de clase inversa la asignatura Ingeniería Aeroportuaria, de tercer curso del grado de Ingeniería Aeroespacialdurante los últimos 3 cursos académicos, haciendo un especial énfasis en la descripción de la estructura del proyecto, de las soluciones tecnológicas y metodológicas propuestas ad-hoc (ymejoradas a través de las experiencias), así como de la percepción de estudiantes y profesorado sobre la experiencia, remarcando retos, oportunidades y grado de satisfacción. En la dinámica con los estudiantes se proponen 25 casos prácticos o problemas que los alumnos resuelven en grupos de 4 o 5 personas y que, en algunas clases, alguno de los grupos expone al resto de sus compañeros. En total se han grabado 231 vídeos en formato Polimedia de los temas 2 al 23 (el tema 1 se imparte en modo tradicional el primer día de clase), con 866 minutos de vídeo y una media de 3 minutos 45 segundos por vídeo. Se incluye una pregunta tipo test para después de cada vídeo que sirve como evaluación formativa (sin contar para la nota) y rompe el ritmo de visionado de los vídeos. Además, se han creado herramientas de automatización del seguimiento que han permitido implementar la metodología de clase inversa en un plazo muy corto de tiempo.Los resultados de esta experiencia revelan que, aplicar la metodología de flipped classroom a una asignatura con tantos alumnos supone el reto de implementar mecanismos automatización y evaluaciónmasiva para intentar llevar un seguimiento lo más personalizado posible. No en vano, aunque en las clases presenciales el intercambio entre profesorado y alumnado –así como entre los propioscompañeros– es crucial para aumentar el rendimiento y la comprensión de los temas, durante esas sesiones se genera una gran cantidad de material por parte de los estudiantes (25 trabajos*100 alumnos/ 5 alumnos por grupo=500 trabajos) que, si se quiere incorporar su corrección a la nota de los alumnos, implicaría un esfuerzo difícilmente asumible por parte del profesor. Además, es evidente la importancia que asume, desde el punto de vista metodológico, la búsqueda de mecanismos eficientes de motivación para, por un lado, conseguir que los estudiantes vengan a clase con los vídeos vistos y los conceptos trabajados, de manera que el trabajo en clase suponga una verdadera puesta en marcha significativa de dichos contenidos; y por otro, para que entiendan de qué forma el esfuerzo invertido en el desarrollo del trabajo se verá compensado. De hecho, en lo que se refiere a los estudiantes, teniendo en cuenta los resultados de los cuestionarios de satisfacción, la mayoría del estudiantado valora muy positivamente la experiencia y entiende que esta metodología les permite aprender más que otras metodologías tradicionales, aunque no por ello estén seguros de preferirla, pues también indican que supone una gran carga de trabajo.