Formación de profesionales de educación superior para su intervención en diferentes contextos
- Bas-Peña, E.
- López Aniorte, Mª. C.
- Maurandi-López, A.
- Rodríguez Rodríguez, L.
- Pozo Serrano, Francisco José del (dir.)
- Peláez Paz, Carlos (dir.)
Editorial: Madrid, Universidad Complutense de Madrid, 2014
ISBN: 978-84-697-0289-5
Año de publicación: 2014
Páginas: 289-294
Congreso: Congreso Iberomericano de Educación Social en situaciones de riesgo y conflicto (1. 2014. null)
Tipo: Aportación congreso
Resumen
El Informe de Seguimiento de la Educación para todos (EPT) en el Mundo 2013-2014. Enseñanza y aprendizaje: Lograr la calidad para todos (p. 25) manifiesta que “si todos los alumnos de países de bajos ingresos egresaran de la escuela con competencias básicas en lectura, 171 millones de personas podrían salir de la pobreza, lo que correspondería a una disminución del 12% de la pobreza en el mundo”; por consiguiente, es fundamental la formación del profesorado que imparte docencia en la Universidad, para promover la investigación sobre las realidades sociales que afectan a la infancia y a la juventud y contribuir a la mejora de sus condiciones de vida. Tanto en la Conferencia Mundial sobre Educación Superior (1998), como en los resultados del seguimiento de cinco años, conocido como CMES+5 (1998-2003), se insiste en que la necesidad de que las instituciones de educación superior se encarguen de educar a graduados calificados que sean ciudadanos responsables, y proporcionarles oportunidades de aprendizaje... pero preservando sus funciones críticas para el interés de la democracia. Estas funciones fueron defendidas por Ortega y Gasset (1930), en su texto Misión de la universidad, quien se cuestionaba la enseñanza superior ofrecida en la misma, que para él consistía en la enseñanza de las profesiones intelectuales; en la investigación científica y la preparación de futuros investigadores, y, en la enseñanza de la cultura. Manifestaba que la sociedad necesitaba buenos profesionales, pero capaces de vivir e influir vitalmente en su época. Conscientes de la importancia de contribuir a la formación del profesorado universitario de República Dominicana, y ante la ausencia en el país de un programa de Doctorado en Educación, concursamos con la Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA) a la III Convocatoria de Proyectos de Cooperación al Desarrollo UM-CAJAMAR 2012, convocada por Resolución Rectoral (R-365/2012) de 11 de julio de 2012. Presentamos y obtuvimos el proyecto titulado “Fortalecimiento del postgrado en República Dominicana mediante el diseño de un programa de Doctorado en Educación”. En él participamos un equipo interdisciplinar de diferentes universidades y facultades. Respecto a la metodología de trabajo, diseñamos cuatro fases y las acciones a realizar en cada una de ellas, también distribuimos las tareas que cada equipo iba a llevar a cabo, correspondiendo al equipo de UTESA los aspectos relacionados con la identificación de necesidades en su país, y al coordinado por la U. de Murcia el análisis de los Programas de Doctorado en España, la elaboración de un primer borrador de acuerdo con las identificación de prioridades que nos proporcionaban, así como la propuesta de créditos por contenidos. Se ha acordado suprimir de la propuesta los contenidos relativos a las cuestiones de género y de violencia de género, porque ya diseñamos un Máster en “Género e igualdad” que está en proceso de implantarse, por lo que sí se ofrecerían líneas de investigación en esta temática. En este momento presentamos una parte del proyecto realizado, correspondiente a las dos primeras fases de un total de cuatro , así como las conclusiones parciales obtenidas hasta la fecha. Actualmente continuamos trabajando en la elaboración definitiva del proyecto y en la redacción del informe final.