Distancia anogenital como marcador antropométrico de origen prenatal de endometriosis

  1. Jimenez Velazquez, Raquel
Dirigida por:
  1. María Luisa Sánchez Ferrer Directora
  2. Jaime Mendiola Director

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 12 de abril de 2019

Tribunal:
  1. Francisco José Sánchez del Campo Presidente/a
  2. Concepcion Carrascosa Romero Secretaria
  3. Mª Isabel Acién Sanchez Vocal
Departamento:
  1. Cirugía, Pediatría, Obstetricia y Ginecología

Tipo: Tesis

Resumen

Introducción: La endometriosis es una enfermedad estrógeno dependiente definida como la presencia de tejido endometrial funcionalmente activo fuera de la cavidad uterina. Puede afectar a diferentes órganos pero fundamentalmente afecta a los ovarios. Existe diferentes formas de endometriosis que incluyen endometriosis ovárica (endometriomas), endometriosis profunda (DIE) y endometriosis con implantes superficiales. La endometriosis tiene una prevalencia aproximada del 10%, afectando a entre el 4 y 30% de mujeres en edad reproductiva. Está asociada a infertilidad, puesto que entre el 30 y el 50% de las mujeres con endometriosis presentan problemas reproductivos. La distancia anogenital (DAG) es la distancia comprendida entre el ano y los genitales externos. Se trata de un dimorfismo sexual característico de los mamíferos placentarios y es considerado un marcador de desarrollo genital que refleja la exposición hormonal a la que el feto ha estado expuesto durante su desarrollo intrauterino, concretamente en el periodo conocido como ventana crítica de crecimiento genital, y se correlaciona con la DAG en la vida adulta. La hormona antimülleriana (AMH) parece ser, en la actualidad, el mejor marcador bioquímico de la función ovárica, debido a su capacidad para reflejar el número de folículos antrales y preantrales presentes en los ovarios. Se utiliza para evaluar la respuesta a la estimulación ovárica en técnicas de reproducción asistida, el daño iatrogénico en la cirugía ovárica y estimar la llegada de la menopausia. También se ha utilizado como biomarcador de seguimiento para mujeres con endometriosis grave confirmada histológicamente (estadios III-IV). El objetivo general de esta tesis es estudiar la DAG como marcador antropométrico de origen prenatal de la endometriosis. Material y Método: Se realizó un estudio observacional de casos y controles en el Servicio de Ginecología del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca en Murcia (España), entre el 1 de septiembre de 2014 y 31 de mayo del 2015. El grupo de los casos estaba formado por mujeres diagnosticadas de endometriosis mediante historia clínica y ecografía transvaginal en la Unidad de Endometriosis del Servicio, y el grupo control estaba formado por mujeres sin endometriosis seleccionadas de la consulta de ginecología de dicho hospital. En ambos grupos se realizaron análisis de AMH en suero sanguíneo y mediciones de la DAG: desde el capuchón clitoiroideo hasta el margen superior anal (DAGAC), y desde el introito, concretamente en la horquilla vulvar hasta el margen superior del ano (DAGAF). Se realizaron análisis estadísticos para estimar la asociación entre la DAG y la presencia de endometriomas y/o DIE, así como su utilidad clínica como prueba diagnóstica, además de la asociación entre la DAG y niveles de AMH con la presencia de endometriosis en pacientes no operadas de endometriosis. Resultados: En el primer trabajo la DAGAF se relacionó con la presencia de endometriosis y/o DIE. Las mujeres en el tercil inferior de la distribución total de DAGAF mostraron más riesgo de sufrir endometriosis en comparación con las del tercil superior: OR=7.6 (IC95%: 2.8-21.0; p de tendencia = 0.001). Con respecto a la DIE, las mujeres con AGDAF por debajo de la mediana mostraron un riesgo mayor de padecer endometriosis en comparación con las que tenían AGDAF por encima de la mediana con una OR=41.6 (IC95%: 3.9-438; valor de p = 0.002). En el segundo trabajo la DAGAF, pero no la DAGAC, se asoció con la presencia de endometriomas, DIE o ambas (valores de p entre <0.001-0.02). El área bajo la curva más alta (0.91; IC95%: 0.84-0.97) se obtuvo para el subgrupo de DIE con la medición DAGAF, con una sensibilidad y especificidad del 84.4% y 91.4%, respectivamente. En el tercer trabajo las pacientes en el grupo de endometriosis no operadas (n=57) tuvieron una DAGAF significativamente más corta (22.8 ± 4.6 vs 27.2 ± 5.7 mm; valor de p <0.001) y una AMH menor (2.2 ± 2.5 vs 3.3 ± 1.9 ng/mL; valor de p <0.003) en comparación con el grupo control (n=93). Las mujeres con una AMH sérica por debajo del límite clínico (1 ng/ml) presentaron 17.4 veces más riesgo de tener endometriosis (IC95%: 5.64-53.82). El área bajo la curva ROC de AMH y AGDAF combinadas fue de 0.77 (IC95%: 0.70-0.85) para el diagnóstico de endometriosis. Conclusiones: Nuestros resultados proporcionan la primera evidencia publicada de una asociación significativa entre un marcador de un ambiente prenatal hormonal (DAG) en mujeres y la presencia de endometriomas y DIE. Esto sugiere que el medio hormonal intrauterino podría desempeñar un papel importante en el desarrollo de la endometriosis, pudiendo tener ésta un origen prenatal. La DAGAF podría discriminar eficientemente la presencia de DIE y ser una herramienta clínica útil en su prevención, diagnóstico y práctica clínica. Además, el estudio de la DAGAF junto con los niveles séricos de AMH podría predecir la presencia de endometriosis con un mayor rendimiento que ambos parámetros por separado y complementar a las técnicas de imagen (ecografía, RMN) para evitar recurrir a un diagnóstico invasivo.