Efecto de la dimensión social en la respuesta emocionalreactividad central y periférica
- Kosonogov, Vladimir
- Juan Pedro Sánchez Navarro Director
- José María Martínez Selva Director
Universidad de defensa: Universidad de Murcia
Fecha de defensa: 04 de diciembre de 2015
- Juan Ramón Ordoñana Martín Presidente
- Miguel Ángel Muñoz García Secretario/a
- Francisco Esteves Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Emociones han sido un objeto de estudio importante en Psicología. Otro tema bien estudiado es la percepción social. Esta tesis estudia cómo el contenido social de los estímulos afectivos puede modificar la respuesta emocional provocada por dichos estímulos. El objetivo principal de la tesis era investigar esta cuestión mediante diferentes métodos. Hemos empleado fotografías clasificándolas atendiendo a dos dimensiones afectivas básicas - valencia afectiva y activación. Para operativizar la variable "contenido social" dividimos los estímulos sociales en tres categorías (sin personas, con una persona y con dos o más personas) y introducimos una escala de autoinforme, "interacción social", que participantes usaron para evaluar el grado de interacción social en imágenes. La parte experimental consiste en cuatro estudios. En el Experimento 1 obtuvimos la evaluación subjetiva de 200 imágenes afectivas para disponer de una base de imágenes equiparadas en valencia afectiva, activación y interacción social para usarlas en sucesivos experimentos. Además, estudiamos las relaciones entre las mencionadas dimensiones. En el Experimento 2 estudiamos respuestas periféricas: actividad electrodérmica, actividad electromiográfica facial y respuesta de parpadeo reflejo de sobresalto durante la observación pasiva de imágenes. En el Experimento 3 investigamos la actividad cerebral mediante la electroencefalografía durante una tarea atencional con imágenes como distractores. En el Experimento 4 introducimos una técnica novedosa para la captación de los movimientos de cabeza como indicadores del estado emocional. Según la evaluación subjetiva (Experimento 1) las imágenes agradables se valoraron como las más sociales. Observamos una correlación positiva entre la escala de interacción social y las escalas de valencia afectiva y activación sólo en el caso de las imágenes agradables: cuanto más social se percibe una imagen agradable, tanto más agradable y activadora es. La actividad electromiográfica del músculo corrugador superciliar era mayor en respuesta a imágenes desagradables con una persona que a imágenes desagradables sin personas (Experimento 2). La actividad electrodérmica era mayor cuando participantes vieron las imágenes desagradables con una persona que cuando vieron las imágenes desagradables sin personas y con dos o más personas. Pensamos que la situación social "uno a uno" provocó cierto estado de incertidumbre. Para explicar este resultado recurrimos al efecto del espectador, que consiste en que los espectadores de situaciones de emergencia son más responsables. Este efecto parece manifestarse en los patrones de la actividad periférica registrados por nosotros. La modulación emocional de la respuesta de parpadeo no fue influida por el contenido social. Probablemente, la base cerebral de percepción social es difusa y no puede modular directamente una respuesta tan rápida. En la tarea atencional con imágenes afectivas como estímulos distractores, las imágenes con dos o más personas provocaron una respuesta más rápida (Experimento 3), lo que interpretamos a la luz de la teoría de la facilitación social que postula que los humanos desempeñan unas tareas mejor en presencia de otras personas gracias a un aumento de activación. Este efecto conductual iba acompañado de la modulación de los potenciales evocados electroencefalográficos. La latencia de las ondas N1a, P2a, P2p, N2a y N2p era más corta y la amplitud de las ondas N2a y P3 era mayor en respuesta a imágenes con una y dos o más personas. Es decir, el procesamiento de tales estímulos es más rápido, pero requiere más recursos. La dispersión espacial de los movimientos de cabeza era menor durante la visión de imágenes agradables con una y dos o más personas que durante la visión de imágenes agradables sin personas (Experimento 4). Este hallazgo está de acuerdo con una visión evolucionista que supone que el ambiente social agradable provoca una sensación de seguridad que puede provenir de la naturaleza social de humanos. Emotions have always been an important subject of study in Psychology. Another well-studied topic is social perception. This thesis studies how the social content of affective stimuli can modulate different responses provoked by such stimuli. The main aim of the present work was to investigate this question using different methods. We employed photographs and classified them according to two main affective dimensions - affective valence and arousal. To operationalise the term "social content", first, we divided social stimuli into three categories (without people, with one person, and with two or more people) and, second, we introduced a self-report scale, "social interaction", that participants used to evaluate the degree of social interaction depicted in pictures. The experimental part consists of four studies. In Experiment 1 we obtained the subjective ratings of 200 pictures to build a set of pictures balanced in affective valence, arousal level and social interaction, in order to use these pictures in the following experiments. We also investigated the relationships between the aforementioned dimensions. In Experiment 2 we measured peripheral variables: electrodermal activity, facial electromyography and modulation of the startle blink response during the passive observation of pictures. In Experiment 3 we investigated the brain activity using the evoked potentials of the electroencephalogram during an attentional task with pictures as background distracters. In Experiment 4 we introduced a new technique for capturing the head movements as an indicator of emotional state and predisposition to act. According to subjective evaluation (Experiment 1), pleasant pictures were evaluated as the most social ones. We observed a positive correlation between the social interaction ratings and the affective valence and arousal ratings only for pleasant pictures (but not for neutral and unpleasant pictures): the more social a pleasant picture was, the more pleasant and arousing was considered. The electromyographic activity of the corrugator supercilii muscle was greater to unpleasant pictures with one person than to unpleasant pictures without people (Experiment 2). Electrodermal response was greater when participants watched unpleasant pictures with one person than when they watched unpleasant pictures without people and with two or more people. We think that the "one-to-one" social situation caused a state of uncertainty, and for a possible explanation we referred to the bystander effect that consists in that in emergency situations observers are more responsible when they are alone. This effect seems to manifest itself in the physiological patterns we obtained. However, the startle blink response was not influenced by the social content. A possible interpretation is that the brain underpinnings of social perception are diffuse and cannot directly modulate the startle blink reflex that develops very quickly. In the attentional task pictures with two or more people provoked a faster response (Experiment 3). We interpret this result in the light of the theory of social facilitation that postulates that humans perform a task better in the presence of others thanks to the increase of arousal. The data on the cerebral activity, as measured by event-related potentials, revealed that the latency of N1a, P2a, P2p, N2a and N2p was shorter and the amplitude of the N2a and P3 was larger to pictures with one person and two or more people. Thus, the processing of social stimuli is faster but requires more resources. The spatial spread of head movement was lesser when viewing pleasant pictures with one and two or more people (Experiment 4). This finding is consistent with an evolutionary theory that assumes that pleasant social environment causes a sense of security that might come from the social nature of humans that allowed them to survive.