Construcción y validación de un set de indicadores de buenas prácticas sobre el manejo del dolor agudo
- Saturno Marcos, Mayo
- Pedro Jesús Saturno Hernández Director
Universidade de defensa: Universidad de Murcia
Fecha de defensa: 15 de decembro de 2015
- Víctor Soria Aledo Presidente
- Fuensanta Meseguer Guaita Secretario/a
- Enrique Rubio Gil Vogal
Tipo: Tese
Resumo
Resumen Objetivos El presente proyecto se divide en 4 grandes bloques: 1. Revisar y sistematizar la evidencia científica y los indicadores existentes, si los hubiera, que traduzcan la presencia de las recomendaciones basadas en la evidencia contenidas en las Guías de Práctica Clínica y la literatura científica consultada, desde enero 2010 hasta junio 2014. 2. Construir un set de indicadores válidos a partir de la máxima evidencia científica y guías de práctica clínica disponibles, que tengan un nivel de evidencia y fuerza de recomendación adecuadas, y que representen en la medida de lo posible todo el ámbito del dolor agudo y todos los grupos de población. 3. Diseñar las herramientas de medición y realizar el pilotaje para establecer su fiabilidad inter e intra-observador, su factibilidad y capacidad para identificar problemas de calidad. Basándonos en el pilotaje, elaborar la versión final de los indicadores y confeccionar un manual de recomendaciones metodológicas para su medición. 4. Evaluar los resultados obtenidos de la medición de los indicadores durante el pilotaje, obteniendo una primera aproximación a la situación actual, y priorizar en función de la opinión de expertos de diferentes comunidades autónomas. Metodología El proyecto se llevó a cabo para la construcción y validación de indicadores de buenas prácticas en el manejo del dolor agudo, e incluyó 5 grandes bloques de actuaciones secuenciales: 1. Acordar/adoptar una clasificación operativa de dolor agudo para revisar y sistematizar sobre esa base la evidencia existente en relación a su valoración, tratamiento inicial y control. 2. Revisar y sistematizar la evidencia y los indicadores existentes que traduzcan la presencia de las recomendaciones basadas en evidencia contenidas en las Guías de Práctica Clínica y la literatura científica consultada. 3. Construir indicadores nuevos cuando sea necesario. 4. Diseñar las herramientas de medición y realizar el pilotaje de los indicadores propuestos, para elaborar la versión final de éstos, y confeccionar un manual de recomendaciones metodológicas para su medición. 5. Valoración del interés potencial de los indicadores en base a la opinión de expertos de diferentes C.C.A.A. Resultados Se obtuvieron un total de 7102 documentos de la búsqueda bibliográfica inicial, entre literatura indexada y no indexada, de los cuales 6849 fueron descartados en primer lugar por título y resumen. De los 253 restantes se descartaron 57 documentos por no ser propiamente guías de práctica clínica, revisiones sistemáticas, meta-análisis o ensayos clínicos aleatorizados, o bien por no tratar sobre el manejo del dolor agudo. De estos 196 documentos restantes, y priorizando aquellos con mayor nivel de evidencia, se extrajeron un total de 252 recomendaciones que se clasificaron inicialmente en tablas según la fase del proceso sobre la que influían (valoración, tratamiento inicial y control), y su nivel de evidencia y fuerza de recomendación. De las 252 recomendaciones iniciales se priorizaron aquellas con un nivel de evidencia y fuerza de recomendación mayores, y con referencia específica al manejo del dolor, reduciéndose a un listado de 56 buenas prácticas en dolor agudo. En total se obtuvieron 53 indicadores, que se distribuyen según situación clínica o tipo de pacientes a los que se aplican. En cuanto al pilotaje, de los 53 indicadores propuestos inicialmente, 11 resultaron no factibles. Se estudió la fiabilidad de los 42 indicadores que resultaron factibles. Todos resultaron fiables. Se realizó además una estimación del nivel de cumplimiento de los indicadores. Un grupo de trece expertos valoró el interés de cada uno de los indicadores de dolor agudo del set propuesto, incluyendo los indicadores que no fueron factibles. Del total de 53 indicadores construidos, 44 obtuvieron una valoración ?3 (en la escala del 1 al 5). Summary Objectives: The present project is divided in 4 stages: 1. Revision and organization of scientific evidence and of existing indicators, if there are, which represent the recommendations based on the evidence found in Practice Guidelines and in the scientific literature consulted, from January of 2010 to June of 2014. 2. Construction of a set of valid indicators derived from the highest level of evidence possible, extracted from Practice Guidelines and scientific literature, and with an appropriate strength of recommendation, which represent all the population groups. 3. Design measurement tools and proceed to pilot testing to establish inter-observer reliability, feasibility and capacity to identify quality problems. Preparation, based on the pilot test, of the final version of the indictors and development of a manual that includes methodological recommendations for their measurement. 4. Assessment of the results achieved from the measurement of the indicators during the pilot test, obtaining the first glance of the actual situation. Prioritization of indicators based on the opinion of experts from different centres within the country. Methodology: The aim of the project was the construction and validation of the indicators of good practice in the management of acute pain, and it included sequentially 5 processes: 1. Adoption of an operative classification of acute pain in order to revise and systematize on that base the existing evidence related to its assessment, initial treatment and control. 2. Revise and systematize the evidence and the indicators found which traduce the presence of the evidence based recommendations contained in the Practice Guidelines and the scientific literature consulted. 3. Construction of new indicators where necessary. 4. Design the measurement tools and carry out the pilot test of the proposed indicators in order to elaborate their final version, and prepare a manual of methodological recommendations for their measurement. 5. Assessment of the potential interest of the indicators based on the opinion of experts from different centres. Results: We obtained a total of 7102 documents within the initial literature search, including indexed and non-indexed literature, of which 6849 were discharged in the first place by title and summary. Of the 253 left, 57 were discharged because they were not strictly practice guidelines, systematic reviews, meta-analysis or randomized clinical trials, or because they did not deal with acute pain management. From the remaining 196 documents, 252 recommendations were extracted and classified depending on what phase of the process they influenced on (assessment, initial treatment and control) and their level of evidence and strength of recommendation. Those 252 recommendations were prioritized according to the highest level of evidence and strength of recommendation, with specific reference on acute pain, reducing the amount of recommendations to 56 good practices on acute pain. In total, 53 indicators were achieved, and classified based on the clinical situation or the kind of patient it dealt with. Regarding the pilot test, of the initially proposed 53 indicators, 11 resulted not feasible. But all of the remaining 42 feasible indicators resulted reliable. In addition, an estimation of the level of compliance was made. A group of thirteen experts assessed the interest of each indicator composing the set for acute pain, including not feasible indicators. Of the total of 53 indicators, 44 obtained a score above or equal to 3, in a scale from 1 to 5.