Poseedores de títulos e grandezasla imagen de la nobleza en los territorios de Murcia

  1. Hernández Vicente, Álvaro
Dirigida por:
  1. Cristóbal Belda Navarro Director/a
  2. Manuel Pérez Sánchez Director

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 08 de noviembre de 2019

Tribunal:
  1. Alfredo José Morales Martínez Presidente/a
  2. María Griñán Montealegre Secretaria
  3. Miguel Ángel Castillo Oreja Vocal
Departamento:
  1. Historia del Arte

Tipo: Tesis

Resumen

La presente tesis doctoral aborda la imagen que proyecta la nobleza en el paisaje del territorio de Murcia. Tras la Reconquista, la nobleza ocupó un papel fundamental en el desarrollo de la sociedad de la Edad Moderna. Palacios, casas señoriales, capillas de patronato, casas-torre, haciendas y blasones revestían una ciudad, huerta y campo que atravesaba su auténtica edad de oro. Calles, plazas, veredas y caminos se convirtieron en coprotagonistas tintados por la cultura visual barroca de influencia nobiliaria que disponía sus elementos de poder en cada uno de ellos. Privilegiados y pecheros murcianos convivieron durante siglos en un territorio de gran identidad nobiliaria, equiparable a otras capitales españolas. Los objetivos de este estudio residen en analizar la aparición de la nobleza murciana, el comportamiento de la nobleza en el espacio público y en el medio privado, la elocuencia de su imagen, la tipología y ubicación de sus viviendas, la recreación de los distintos espacios urbanos y rurales. Esta tesis ha profundizado en el comportamiento de la nobleza en el espacio religioso, desde las fundaciones al nexo interno que relaciona religiosidad e imagen nobiliaria, la fundación de capillas, derechos y obligaciones de los patronos, labor de mecenazgo artístico en el patrimonio mueble y por último, la elección del lugar de enterramiento. Parroquias, conventos y monasterios jugaban un papel esencial en la Murcia barroca, proyectando en cada espacio el abolengo de su linaje. Finalmente, la huerta y el campo han sido los dos espacios que dan respuesta a la capacidad económica, un poder que quedaba reflejado en casas-torre, grandes explotaciones, haciendas y jornaleros. La metodología se ha centrado en tres fuertes pilares: un exhaustivo trabajo de campo, el vaciado documental y bibliográfico y la elaboración sistemática de recorridos, planos y catálogos que han permitido recrear aquel paisaje que desapareció por el desconocimiento, el interés y la desidia. Se puede concluir diciendo que Murcia tenía entre sus calles dos centenares de residencias señoriales blasonadas, destruidas en su 90%; aportación que consigue completar la imagen de la ciudad de Murcia hasta ahora incompleta. También se puede afirmar que en el medio rural la nobleza acumuló más de doscientas propiedades representadas en casas-torre y haciendas de campo, de las cuales muy pocas han pervivido hasta nuestros días. En el espacio religioso la nobleza revistió templos con patrimonio artístico mueble y fundó más de un centenar de capillas por todos los templos de Murcia, siendo protagonista su Catedral y los conventos de órdenes mendicantes, donde se mezclaba la identidad más intima familiar con la religiosidad pública, convirtiendo el espacio sagrado en una gran escenario de influencias.