Efectos del entrenamiento en circuito basado en el método interválico de alta intensidad (HIIT) en los parámetros cardiovasculares y funcionales de mujeres mayores
- Ballesta García, Ismael
- María Carrasco Poyatos Director/a
- Ignacio Martínez González-Moro Codirector
Universidad de defensa: Universidad de Almería
Fecha de defensa: 25 de junio de 2020
- Vicente Ferrer López Presidente
- Antonio Granero Gallegos Secretario/a
- Noelia González Gálvez Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
El incremento de la población mayor de 65 años en España es una realidad. Por ende, las enfermedades asociadas al envejecimiento, como las relacionadas con el sistema cardiovascular, la sarcopenia o la fragilidad, aumentan en la misma línea. Las administraciones públicas, en un intento tanto por prevenir como por tratar estas enfermedades, están subvencionando programas de ejercicio físico destinados a mejorar la condición física de estas personas. La condición física está íntimamente relacionada con la disminución del riesgo de enfermedades cardiovasculares, el aumento de la calidad de vida y una mayor autonomía para el desenvolvimiento de las actividades de la vida cotidiana. En el caso de los programas de rehabilitación cardíaca, el entrenamiento interválico de alta intensidad (HIIT) está teniendo un papel cada vez más importante. Los estudios no solo sugieren que aumenta el consumo máximo de oxígeno (VO2máx) más que otros tipos de entrenamiento (como el continuo de moderada intensidad – MIT), sino que, además, tiene un efecto cardioprotector, como mejoras en la presión arterial (PA), en la frecuencia cardíaca (FC) o en la función endotelial. Sin embargo, las magnitudes de la carga de entrenamiento empleadas en estos programas son muy heterogéneas. Esta heterogeneidad podría explicar las controversias en la literatura en cuanto a resultados. En el caso de los programas de prevención, las sesiones de entrenamiento son grupales, por lo que el método de entrenamiento más común es el entrenamiento en circuito. Estos programas suelen ralizarse en centros de día o de mayores y están orientados a conseguir mejoras en factores funcionales (como la fuerza, la resistencia aeróbica, la agilidad o el equilibrio) y en factores relacionados con la salud cardiovascular (como el aumento del VO2máx o la normalización de las cifras de parámetros relacionados con la FC o la PA). Sin embargo, aunque están demostrados los efectos beneficiosos de los programas tipo HIIT en otras poblaciones, este método de entrenamiento ha sido escasamente aplicado en personas mayores. Considerando lo anterior, los objetivos principales de esta tesis doctoral son (1) identificar la mejor dosis de HIIT para optimizar el consumo máximo de oxígeno de pacientes con enfermedad de las arterias coronarias o con insuficiencia cardíaca en programas de rehabilitación cardíaca; (2) analizar las adaptaciones producidas en la capacidad funcional y en el índice de masa corporal de un programa de entrenamiento en circuito basado en el entrenamiento interválico de alta intensidad en mujeres sanas de mediana edad y mayores, y (3) analizar las adaptaciones producidas en la capacidad cardiorrespiratoria, en los valores de presión arterial y en parámetros de la frecuencia cardíaca de un programa de entrenamiento en circuito basado en el entrenamiento interválico de alta intensidad en mujeres sanas de mediana edad y mayores. Para abordar el primer objetivo se realizó una revisión sistemática con metanálisis donde se analizó la aplicación de las variables de magnitud de la carga (volumen, intensidad, duración, frecuencia y densidad) de los distintos programas tipo HIIT que hay en la literatura. Asimismo, también se sometieron a análisis otras variables como el sexo, la edad, el índice de masa corporal (IMC) y la calidad metodológica de los estudios. Para llevar a cabo el estudio, en primer lugar, se realizó una búsqueda en seis bases de datos (MEDLINE, Web of Science, LILACS, CINAHL, Academic Search Complete y SportDiscus), incluyéndose un total de 19 artículos que empleaban el HIIT y medían el VO2máx de pacientes con EAC e IC. Posteriormente, debido a la heterogeneidad de los protocolos, los valores medios de las variables de magnitud de la carga se distribuyeron en dos grupos diferentes, mediante un modelo de efectos aleatorios. Por último, se llevó a cabo un metanálisis de efectos aleatorios para determinar en qué enfermedad se obtenía un mayor beneficio con el HIIT y si había diferencias en los protocolos de HIIT empleados para cada patología. Los resultados obtenidos en este estudio revelaron que el HIIT es un tipo de entrenamiento eficaz para aumentar de forma significativa el VO2máx en ambas patologías, siendo más efectivo en pacientes con IC. Además, los resultados abogan por recuperaciones activas (entre un 40-60% del VO2máx) en estos pacientes. Del mismo modo, la frecuencia mínima de entrenamiento recomendada es de dos días a la semana en pacientes con EAC y de tres días a la semana en pacientes con IC. En la segunda y tercera publicación se abordaron el segundo y tercer objetivo de esta tesis. En estas se pretendió trasladar las conclusiones obtenidas en el primer estudio, a un programa de ejercicio físico en circuito basado en esta metodología (HIICT), pero en mujeres sanas de mediana edad y mayores. En este caso, se determinó qué adaptaciones producía el HIICT sobre la capacidad funcional, el IMC, la capacidad cardiorrespiratoria, en cifras de PA y en diferentes parámetros de FC. Además, los resultados se compararon con los de un programa de similares características a moderada intensidad (MICT), así como ambos con un grupo control (GC). Este ensayo clínico aleatorizado incluyó un total de 54 mujeres, que fueron distribuidas en tres grupos con el mismo tamaño muestral (HIICT, MICT y GC; n = 18). La secuencia de aleatorización fue creada usando Excel 2016, con una ratio de asignación 1: 1. Los pacientes de los grupos HIICT y MICT entrenaron dos días a la semana (1 h por sesión) durante 18 semanas. Los ejercicios realizados en HIICT y MICT, se centraron en movimientos de las piernas combinados con ejercicios de los brazos con o sin carga externa. La diferencia entre programas fue la velocidad de ejecución. Se trabajó en puntuaciones de 14-18 puntos en la escala de esfuerzo percibido de Borg (EEP) en el grupo HIICT, y de 9-14 puntos en la EEP en el grupo MICT. Por otro lado, se motivó a las mujeres del GC a continuar con su rutina habitual. Para comparar las variables de estudio antes de la intervención, se calculó el análisis de la varianza (ANOVA) para medidas repetidas. Para comparar las variables tras la intervención se usó el análisis de la covarianza (ANCOVA). Se incluyeron como covariables las características basales y la edad. Los resultados se dividieron en dos publicaciones: una que incluyó las variables funcionales y otra con las variables relacionadas con el fitness cardiorrespiratorio. Los resultados de las variables funcionales se mostraron en la segunda publicación que compone la presente tesis doctoral. Se obtuvo que tanto el HIICT como el MICT son métodos efectivos para mejorar la fuerza, la resistencia aeróbica, la agilidad y el equilibrio dinámico de mujeres sanas de mediana edad y mayores. Sin embargo, solo el grupo HIICT fue capaz de generar adaptaciones en la fuerza de los brazos y de modificar el IMC. Por otro lado, la tercera publicación de esta tesis expone los resultados de las variables relacionadas con el fitness cardiorrespiratorio. Estos resultados muestran que tanto el HIICT como el MICT son métodos de entrenamiento efectivos para aumentar el VO2máx estimado y para normalizar la respuesta de las cifras de presión arterial diastólica tras una prueba de esfuerzo. Sin embargo, solo el HIICT normalizó la respuesta de las cifras de presión arterial sistólica tras dicha prueba. Por último, de la presente tesis se extraen las siguientes conclusiones generales: (1) que la revisión sistemática con metanálisis aporta evidencias de que el HIIT es un método efectivo para aumentar el VO2máx de pacientes con EAC o IC, siendo este incremento superior en los últimos. Además, para optimizar estos beneficios, se deben aplicar recuperaciones activas (40-60% del VO2máx) y entrenar con una frecuencia mínima de dos sesiones semanales en pacientes con EAC y de tres sesiones semanales en pacientes con IC; (2) que tanto el HIICT como el MICT mejoran la capacidad funcional (fuerza, resistencia aeróbica, agilidad y equilibrio dinámico) de mujeres sanas de mediana edad y mayores, siendo efectivo solo el HIICT para mejorar la fuerza de los brazos y para modificar el IMC; (3) que tanto el HIICT como el MICT aumentan el VO2máx y normalizan las cifras de presión arterial diastólica durante el ejercicio, siendo efectivo solo el HIICT para normalizar las cifras de presión arterial sistólica durante el ejercicio.