Identificación y caracterización de biomarcadores de patología de la enfermedad de chagas y de eficacia del tratamiento con benznidazol
- Fernández Villegas, Ana Isabel
- Concepción Marañón Lizana Director
- Manuel Carlos López López Director
- M. Carmen Thomas Carazo Director
Defence university: Universidad de Granada
Fecha de defensa: 11 July 2012
- Carlos Alonso Bedate Chair
- Ana Clara Abadía Molina Secretary
- Manuel Segovia Hernández Committee member
- Elena Gonzalez-Rey Committee member
- Basilio Valladares Hernández Committee member
Type: Thesis
Abstract
RESUMEN La enfermedad de Chagas, o tripanosomiasis americana es causada por el protozoo flagelado hematófilo Trypanosoma cruzi. Esta zoonosis es endémica del continente americano. Se estima que existen entre 8 y 10 millones de personas infectadas en el mundo y que cerca de 40 millones están en riesgo de infectarse (Coura and Dias, 2009; Schofield and Galvao, 2009). La enfermedad presenta unos elevados índices de mortalidad y morbilidad asociados con trastornos cardiacos y digestivos. Actualmente, debido a los movimientos migratorios, la enfermedad de Chagas está presente en zonas no endémicas, donde la transmisión por transfusión sanguínea, transplantes de órganos y vía transplacentaria resultan en un alto número de nuevos casos (Wendel, 2010; Barcan et al., 2005; Carrilero et al., 2009). La enfermedad cursa con diferentes fases; una fase aguda subclínica en la mayoría de los casos, que ocasiona la muerte en el 10% de los pacientes. A la fase aguda le sigue una fase indeterminada inaparente y una fase crónica (40% de los pacientes) en la que el parásito persiste en tejidos profundos y a la que se le asocian altas tasas de mortalidad y morbilidad. A lo largo de la fase crónica, puede aparecer sintomatología cardiaca y/o trastornos digestivos. En fases avanzadas, la enfermedad crónica de Chagas puede causar la muerte (Prata, 2001; Punukollu et al., 2007). Los dos medicamentos disponibles para el tratamiento de la enfermedad de Chagas son el Benznidazol y el Nifurtimox. Ambos fármacos presentan diversos efectos secundarios, como fiebres, dolores musculares, pérdida de peso y reacciones cutáneas. En la fase inicial aguda, la administración de estos medicamentos ayuda a controlar la enfermedad y disminuye la probabilidad de cronicidad (Jannin and Villa, 2007), pero en fases crónicas su efectividad no está firmemente demostrada. Estudios previos han indicado que el tratamiento con benznidazol en pacientes asintomáticos retrasa la aparición de daños cardiacos (Gallerano and Sosa, 2000; Viotti et al., 1994). Actualmente, las pruebas serológicas más utilizadas para el diagnóstico de Chagas son el ensayo de hemaglutinación (IHA), el ensayo de inmunofluorescencia (Woolley and Merrifield) y el ensayo por inmunoabsorción ligado a enzimas (ELISA). Los antígenos que contienen estos tests son extractos de proteínas totales del parásito o una combinación de proteínas recombinantes del mismo (Britto et al., 2001; Viotti et al., 2006). Estas técnicas son capaces de detectar la respuesta de anticuerpos producida frente a las proteínas de parásitos en sueros de pacientes de Chagas, aunque no son útiles para diferenciar si el paciente se encuentra en fase indeterminada o en fase crónica de la enfermedad, resultan poco útiles para evaluar la progresión de pacientes bajo tratamiento, ya que los anticuerpos son muy estables y persisten durante mucho tiempo (WHO, 2002). Por tanto, las pruebas serológicas convencionales no permiten detectar la evolución de respuesta tras el tratamiento y por tanto reconocer fallos terapéuticos. Debido a la importancia y necesidad de evaluar el estado de la enfermedad de pacientes de Chagas, tanto la fase de la enfermedad como durante el seguimiento tras el tratamiento con benznidazol, se han propuesto como objetivos, por una parte la búsqueda de moléculas capaces de discernir entre fases de la enfermedad de Chagas y, por otra parte, encontrar marcadores susceptibles de ser sensibles al tratamiento con benznidazol con valor predictivo del estado clínico del paciente. Con los resultados descritos a lo largo de este trabajo hemos podido establecer un biomarcador serológico de la enfermedad de Chagas capaz de distinguir entra la fase crónica asintomática y fase crónica sintomática (manifestaciones cardiacas o trastornos digestivos). Por otra parte, se han identificado un sistema de marcadores serológicos útiles para evaluar la modificación de la respuesta inmunitaria adaptativa en pacientes de Chagas tratados con benznidazol. Y, por último, se presenta la aplicación de los marcadores serológicos anteriormente mencionados en un caso clínico de dos mellizos infectados con Trypanosoma cruzi vía congénita en una zona no endémica como es España.