Cantidad y ritmo de adquisición léxica en un contexto de introducción no sistemáticaEstudiantes de Inglés como Lengua Extranjera en Educación Primaria = Quantity and rate of vocabulary acquisition in the context of non-systematic input : elementary education students of english as a foreign language
- Alcaraz Mármol, Gema
- Aquilino Sánchez Pérez Director/a
- Pascual Cantos Gómez Director
Universidad de defensa: Universidad de Murcia
Fecha de defensa: 25 de febrero de 2011
- Rafael Monroy Casas Presidente/a
- María Lourdes Cerezo García Secretaria
- Miguel Fuster Márquez Vocal
- Sabine Braun Vocal
- Ricardo Mairal Usón Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
El principal objetivo de esta tesis es averiguar hasta qué punto la introducción no sistemática del vocabulario está relacionada con su aprendizaje. A pesar de las recomendaciones científicas sobre una introducción sistemática del input, los materiales didácticos muestran una presentación no sistemática del mismo. Lo que es más, no son muchos los materiales didácticos que ofrecen, si acaso, escasa información sobre la selección del vocabulario que aparece tanto en términos de calidad, cantidad y ritmo. La falta de correspondencia entre la realidad y la teoría es lo que ha suscitado el presente trabajo de investigación. Un grupo de 44 estudiantes de inglés como lengua extranjera en Educación Primaria participaron en el estudio. Se utilizaron varios tipos de test para medir periódicamente su adquisición léxica durante 12 semanas. Su exposición a la lengua extranjera se reducía al ámbito del aula, más concretamente al contenido del libro de texto que seguían. Los resultados de la tesis muestran que no todo el léxico clave introducido por el libro de texto, y que se esperaba que los alumnos aprendieran, fue adquirido. Se detectaron graves deficiencias de introducción léxica en el material didáctico utilizado, las cuales se reflejaron en la adquisición léxica por parte de los aprendices. Además, las cifras apuntan a un ritmo de adquisición léxica irregular, pero solo parcialmente limitado por la introducción de input en el libro de texto. Por otra parte, se ha podido observar que es posible predecir la tendencia del ritmo de aprendizaje, pero no la cantidad exacta a la que ese ritmo crece. Esto nos lleva a plantearnos si la manera en la que se trata el vocabulario en las aulas españolas es la más adecuada. Ante esta situación, sugerimos algunas recomendaciones. Tales sugerencias van destinadas a distintos sectores de la comunidad docente. El primer sector concierne a los diseñadores de materiales. A pesar de que una distribución regular no ha sido determinante para la adquisición en este estudio, sí que se ha observado que el proceso de adquisición puede predecirse y, por lo tanto, modelarse. De ahí que encontramos fundamental que la manera en la que se introduce el input se adapte a la manera en que ese input se aprende. Además, la sistematización de los materiales didácticos debería basarse en la revisión tanto intensiva como extensiva. La primera se refiere a la intensidad con la que se trabaja el vocabulario, mientras que la segunda está relacionada con la periodicidad. Esto es, no solo es importante que todas las palabras clave se trabajen con la misma intensidad, sino que también deben revisarse periódicamente a lo largo del proceso de aprendizaje. El diseño de materiales debería tener como criterios principales la construcción de conocimiento léxico de manera ordenada, cumulativa y asociativa. Esta sugerencia implica una introducción del vocabulario donde V - esto es, el nuevo vocabulario que se introduce y presumiblemente se adquiere - vaya seguido por V+1, después por (V+1)+1, por ((V+1)+1)+1 y así sucesivamente. Además, no es solo que el vocabulario se introduzca de esta manera, sino que también debe parecer que se introduce de tal forma. Los estudiantes deberían tener la sensación de que tienen la oportunidad de usar lo que han aprendido y de que siguen aprendiendo. Un programa de actuación como el sugerido sobre estas líneas podría promover esa sensación en los estudiantes. El papel de los formadores de profesorado también es esencial. Deben animar a los docentes a adoptar una postura crítica frente a los materiales didácticos e intentar mejorar las unidades didácticas que se consideren léxicamente deficientes. Los formadores deberían promocionar cursos específicamente destinados a la selección y adaptación de los materiales didácticos, donde los docentes aprenderían cómo analizar la calidad de un libro de texto en lo que concierne al vocabulario. Otro sector esencial es, sin duda, el de los docentes. Ellos son el vínculo más directo entre el contenido léxico del libro de texto y el estudiante. Es más, normalmente son los últimos responsables en la selección del libro de texto. Así, deberían transmitir la importancia del léxico a sus alumnos, además de promocionar y monitorizar un enfoque sistemático de estudio del mismo. Finalmente, no debemos olvidar la responsabilidad de la comunidad científica. La primera recomendación apunta a una exploración más detallada de las líneas de investigación que se han abierto en esta tesis doctoral. En primer lugar, se deben aunar esfuerzos para unir ciencia y realidad con el fin de mejorar la enseñanza de segundas lenguas. En segundo lugar, sería deseable que se llevaran a cabo más estudios sobre el ritmo de adquisición léxica en distintos contextos y desde distintas perspectivas. En tercer lugar, se recomienda un análisis profundo sobre el efecto en la adquisición léxica de los factores intraléxicos y extraléxicos. Por último, consideramos que el futuro en los avances en el área de adquisición de vocabulario en segundas lenguas pasa, al menos en parte, por la interdisciplinariedad. La pedagogía, la neurología, la sociología e incluso la política pueden ayudar a abrir nuevos caminos a este respecto.